Un pacto que incluye el canje de rehenes por presos palestinos y la retirada de tropas israelíes a una zona acordada, constituye el primer acuerdo sobre el plan de paz para el futuro de Gaza, mientras el Presidente de Estados Unidos se apresta a viajar este fin de semana a Oriente próximo para la firma. Todos los rehenes serán liberados en las próximas horas e Israel retirará sus tropas como primer paso hacia una paz sólida, permanente y duradera.
48 rehenes israelíes (la mayoría sin vida) serán canjeados por unos 2.000 presos palestinos como parte del plan que fue aceptado por Hamás y por Israel, por lo menos en su fase de aproximación.
Atrás quedan 67.000 muertos (sobre todo menores y mujeres) y 170.000 heridos, 40.000 de ellos con heridas que cambiarán su vida y una devastación material sin precedentes en la era moderna.