La obligada ausencia de Crónicas no había podido ser explicada en detalle, no obstante lo cual si bien la mayoría conoce las razones no está demás darlas.
Semana Santa fue tradicionalmente junto con Carnaval los dos períodos utilizados en el año en los que la frecuencia diaria se interrumpió.
El viernes 26 cuando faltaban 48 horas para Turismo un alerta por coronavirus activó los protocolos de la Departamental de Salud que conminó a todo el personal de oficinas, redacción, repartidores y cobranza a permanecer en cuarentena a la espera de la realización de los hisopados correspondientes.
Esa inesperada novedad conocida sobre las 18 horas cuando la edición del sábado estaba en pleno proceso, obligó a interrumpir de inmediato las tareas, sin tiempo para realizar una comunicación adecuada. Tradicionalmente, el anuncio de nuestra ausencia debía ser publicado en la edición del domingo, (último día previo a la licencia) y al no poder ocurrir muchos lectores quedaron sorprendidos y sin explicaciones, máxime cuando telefónicamente tampoco pudieron hacerlo en razón del cierre de las oficinas.
Afortunadamente, los hisopados realizados durante la semana al personal dieron negativo, por lo que, con excepción del caso, el resto se reintegró a las tareas. Sin poder aún explicarnos un contagio que se salteó todas las medidas de precaución, debemos razonar que dentro de todo lo malo, la suerte jugó de nuestro lado, porque pudimos aprovechar esa licencia para la realización de la cuarentena aunque a ninguno de nosotros nos hizo gracia el encierro.
Hecha la aclaración confiamos en que de a poco vayamos superando la adversidad con los esperados resultados de la vacunación y podamos de una vez por todas dejar de hablar de un tema que nos abruma.
Gracias.