Hola amigos. Hay gente que me da risa por no decir algo peor. Y es ese tipo de gente que le atribuye todo a las circunstancias y dice "me tapó la ola; fui desbordado; las circunstancias pudieron más". Es cierto, todos tenemos circunstancias en la vida que no elegimos, momentos que no quisiéramos tener. Aún los que vemos sonrientes, todo el mundo tiene una herida interna. Todos vivimos con alguna herida interna.
Te voy a contar el caso de Boris Cyrulnik. En 1944 era un niño de seis años, huérfano, sin ningún familiar, perdido en la calle. Estamos en Burdeos, cuando los alemanes son echados de Francia y estamos frente a este niño cuyos padres fueron conducidos a un campo de concentración y fueron muertos.
Ese niño quedó suelto deambulando por varios días en una ciudad extraña que tampoco era la suya porque había sido transportado por distintos azares y que por distintos azares fue abandonado hasta que la beneficiencia pública, el Estado que recién se estaba reorganizando, lo toma a él como a otros tantos niños de la calle y lo lleva a un asilo.
Repito: seis años tenía Boris cuando entra al asilo. Está desnutrido, necesita alimentación y sobre todo está paralizado, no entiende por qué sus padres no están con él. No lo puede entender. A los dos o tres meses, ya repuesto de la salud física, es anotado en la escuela, con un estrés post-traumático y se pone a estudiar.
17 años más tarde es Siquiatra y se dedicó a los estudios neurológicos y se dedicó además de Psicología estudiar Anatomía específicamente y también Filosofía. Y con su descubrimiento se convirtió en una de las eminencias de la ciencia de la conducta contemporánea.
Boris Cyrulnik es el fundador de la identificación de la resiliencia que es uno de los recursos más interesantes que hemos encontrado justamente para tratar con esa "ola" que te tapa.
La palabra, es una palabra prestada. En realidad es una palabra que viene del mundo de la Física y no se puede encontrar en la Facultad de Medicina, ni en la de Sicología, ni en la de Ingeniería. Resilientes son algunos materiales que cuando son sometidos a una presión que tiende a deformarlos, tienen la capacidad de volver dentro de un tiempo a su postura inicial; recobran el perfil que tienen. Algunos metales por ejemplo, que fueron presionados o empujados, luego de un tiempo recobran su característica original. A eso se le llama cuando un material es resiliente. Se usa para los metales, para ciertos tipos de cemento (algunas columnas son resilientes, sufren un pequeño choque pero vuelven a su lugar); algunas chapas son resilientes.
¿Qué descubrió Boris Cyrulnik? que vos y que yo también somos resilientes. Que la vida nos puede abofetear, una, dos y muchas veces, pero que también en nosotros está la capacidad de recobrar el perfil esencial, el perfil inicial.
Nosotros podemos, cuando lo perdemos todo, empezar una y otra vez.
¿Cuántas veces en la vida nos hemos encontrado con un callejón sin salida?. Y aquí estamos vos y yo.
Eso es lo que estudió Boris. ¿Dónde lo estudió? de una manera multidisciplinaria. El llegó a tener un departamento en la Universidad de Mármara, una de las más prestigiosas del mundo y también en la Clínica de la Universidad de Toulon, donde hizo sus primeros experimentos y se dio cuenta que los neurotransmisores emiten conducciones a determinados centros de nuestro cerebro y ciertas terminales transmiten algunos neurotransmisores que pueden darnos la fuerza necesaria para empezar de nuevo.
¿Y cuál es el secreto de eso.? El publicó varios libros en los que explicó que hay ciertas experiencias de nuestro vivir (las caricias de tu madre, una música que escuchabas en un momento en que estuviste bien), ciertos elementos que son los que constituyen un jardín querido y privado que cuando son convocados ponen en movimiento una maquinaria físico-química que aviva la transmisión de elementos estimulantes que modifica conductas y respuestas de nuestro cerebro y nos hace fuertes.
¿Dónde encontramos nuestra fortaleza? ¿qué es lo que nos hace fuertes?: aquello que amamos; aquello que en algún momento nos dio alegría; aquello que tenemos guardado porque lo queremos mucho.
Yo te recomiendo que te encuentres con los trabajos de Boris Cyrulnik. El ha escrito muchos libros, de los que te recomiendo "De cuerpo y alma; neuronas y afecto".
Hay otro libro muy bueno que se llama "El amor nos cura" y otro muy interesante "El murmullo de los fantasmas" que trata cómo volver a la vida después de un trauma. Todos nosotros volvemos a la vida después de un trauma. Todos nosotros de alguna manera nos despertamos después de alguna pesadilla pero aquí estamos, despiertos, y eso es obra de la resiliencia.
Hay cosas que la naturaleza te dio o que la naturaleza no te dio, pero la resiliencia se cultiva. ¿Dónde está?, está en el tesoro de lo que has vivido. Inconscientemente todos vamos guardando cosas buenas de nuestra vida. La música, los recuerdos, los afectos, son la fuente desde donde el Sicólogo y el Siquiatra trabajan según Boris, para que puedas encontrar fuerzas y empezar de nuevo como corresponde.