Una impresionante balacera y una gran cantidad de enfrentamientos armados entre bandas narcos y fuerzas de seguridad se desataron ayer en Culiacán, Sinaloa, en medio de un operativo policial para detener a uno de los hijos del narcotraficante Joaquín “Chapo” Guzmán. Según informaron medios mexicanos, las balaceras se originaron por la detención de Ovidio Guzmán, de 28 años. Fue un operativo conjunto entre elementos de la Guardia Nacional y de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena). Las autoridades pidieron a la gente que, por seguridad, no salga de sus hogares.
Además, el secretario de Seguridad de Sinaloa, Cristóbal Castañeda, reportó en declaraciones a Milenio TV que “entre 20 y 30” presos se fugaron del penal de Aguaruto, y precisó que “hay diferentes enfrentamientos alrededor de la ciudad”. El funcionario confirmó al menos dos muertos en la fuga. Se trata de dos de los guardias de seguridad del penal. El presidente mexicano Manuel López Obrador evitó dar precisiones al ser abordado por el periodismo en un aeropuerto: “Se informará mas tarde, lo va a hacer el gabinete de seguridad que está reunido, hay que esperar”. Culiacán se convirtió en un infierno por los enfrentamientos armados que comenzaron hace más de tres horas y tienen en vilo a toda la ciudad.
Dorados de Sinaloa, el equipo que hasta meses dirigió Diego Maradona, debía jugar ayer jueves frente a Atlante pero el encuentro fue suspendido.
“Chapo” Guzmán, el jefe del cartel de Sinaloa, está preso en Estados Unidos, cumpliendo la cadena perpetua a la que fue condenado en ese país.
Con la tercera y última detención de “Chapo” en 2016, hubo una lucha por el control del grupo que fue desactivada con el encarcelamiento de Dámaso López Núñez y su hijo, Dámaso López Serrano. El primero fue capturado por México y el segundo se entregó voluntariamente a las autoridades estadounidenses.
Los expertos coinciden en que las riendas del cartel, que sigue operando a pesar del encarcelamiento de su líder, está en manos de Ismael ‘Mayo’ Zambada, cofundador de la organización criminal hace tres décadas y de dos de los hijos de “Chapo” Guzmán; Iván Archivaldo y Alfredo Guzmán, conocidos como ‘Los Chapitos’”