La Ministra de Seguridad Patricia Bullrich quedó mal parada después de haber atribuido "a las mafias que operan en las sombras" el ataque a un diputado en las afueras del Congreso argentino.
Juan Jesús Fernández, un gitano cuya hija había tenido una relación sentimental con el hombre asesinado, fue detenido en Concepción del Uruguay cuando se aprestaba a cruzar a Paysandú. Iba a atravesar el Uruguay para refugiarse en Brasil.
El hombre, en compañía de un sobrino (o un hijo) no está claro, o quizá el propio marido de la joven, asesinó al funcionario Miguel Yadón e hirió gravemente al diputado nacional Héctor Olivares.
La noticia que sacudió ayer a la argentina trepó a los sitios más altos del gobierno y el propio Macri habló de inmediato a la población advirtiendo del hecho de violencia, mientras la ministra Bullrich hablaba de operativos mafiosos.
Sin embargo, se supo luego que el asesino Juan Fernández estaba borracho, era un gitano cuya hija de 17 años casada con otro gitano, había tenido una relación fuera del matrimonio, hecho inaceptable en la colectividad.