Lllegó acompañado por Tabaré Viera, los diputados Conrado Rodríguez y Walter Berri, como así también por dirigentes  de Soriano encabezados por el edil Juan Rey.

Una sala que recibió a ciudadanos colorados, pero también de otros partidos, que sintieron el interés de escuchar las palabras de este dirigente que hace unos seis meses y respondiendo a una convocatoria de dirigentes de su partido de varios puntos del país, aceptó el desafío de retornar para sacar adelante a su Partido Colorado, objetivo que hoy considera viene siendo cumplido en forma excelente.

En diálogo con la prensa Sanguinetti reconoció que lo importante es tender puentes de fraternidad dentro del propio partido, que habrá balotaje en las próximas elecciones y que en marzo se resolverán los temas vinculados a la fórmula dentro del Partido Colorado.

Sanguinetti afirmó que “el retiro de Bordaberry había generado una falta de conducción en el Partido Colorado y las encuestas marcaban una baja constante por lo que a fines de mayo me visitaron varios dirigentes del sector y yo que estaba con la angustia de ver al partido declinando, acepté volver al ruedo, pero también les aclaré que había dos objetivos muy claros: uno de ellos era devolverle al partido Colorado la capacidad de decisión política desde el punto de vista electoral y la restante, imaginar y comenzar a trabajar para un gobierno de coalición, porque acá no va a haber ni gobierno blanco, ni gobierno colorado, porque nadie hoy dispone de una mayoría suficiente. Por esto ya mantuve un encuentro con los líderes blancos, les pedí que estuvieran juntos. Como resumen, luego de varios meses, les puedo decir que actualmente estoy feliz, me alegro de haber retornado al contacto con la gente y comienzo a sentir que el Partido Colorado cambió el talante y la actitud. 

Gente vieja se recupera, otros que estaban retirados se acercan nuevamente y muchos jóvenes vienen a mirar con expectativa y advierten que les proponemos una política más clásica, de palabras más precisas, de conceptos más definidos y con ese aliento, hemos recorrido el país”.

Consultado sobre si entiende que habrá un balotaje en las próximas elecciones, indicó que “seguramente que sí, porque el Frente Amplio no es ni cerca lo que fue, sus políticas han fracasado, la reforma de la Seguridad Social hoy está comprometida, en una palabra hoy está en una situación crítica a lo que se le añade políticamente algo muy importante y es que el grupo Astori ya no es lo que era, a éste le bajaron el pulgar y ya no es candidato. 

En otra parte de su diálogo analizó los años de gobierno del Frente recordando que la coalición de izquierda llegó al poder en el año 2002 en el medio de un default de Argentina, luego le siguen los cambios de los precios internacionales y con esa fortuna en la mano se pensó que se iba a bajar la deuda externa y hacer obras de infraestructura pero, no se concretó nada. 

“Aquella situación excepcional pasó y hoy estamos en la normalidad pero nos encontramos que la deuda de 13 mil millones ascendió a 40 mil, que los intereses que se deben pagar todos los meses es de 2 mil millones de dólares, que hay una situación económicamente explosiva, que se debe refinanciar la seguridad social y esa es una gran hipoteca que se le estará dando al gobierno que vendrá.

Hoy nuestro Partido Colorado está reflotándose, no sabemos cuál será el techo y la gente mira al partido de la responsabilidad, al partido que sacó siempre de la crisis al país, al que construyó las instituciones básicas de la República y ese es un factor importante para este proceso de recuperación que se está viviendo.

Nuestra política siempre ha sido de tender puentes, practicamos la fraternidad dentro de nuestro partido y la concordia con aquellos que nos une el sentimiento democrático, la filosofía liberal y el patriotismo constitucional de la República. Yo insisto en que este balotaje no va a ser entre Pedro y Diego, sino que va a ser una confrontación entre los que creen que Venezuela es una democracia y los que creemos que es una dictadura y eso de alguna manera resume la diferencia de principios que tenemos quienes estamos hoy en la oposición frente a quienes están hoy en el gobierno.

La coalición -explicó- no será sumar por sumar, sino que habrá que ponerse de acuerdo porque hay temas importantes a definir como saber qué se hará en el tema seguridad, política exterior, si se seguirá luchando con la reforma educativa porque cree que no hay alternativa de cambio si no se logran esos acuerdos. 

“Esto debe ser antes, pero sentimos la satisfacción de que el tema del gobierno de coalición ya está instalado y a partir de ahora, en marzo del año próximo resolveremos todo el tema de las fórmulas de cara a una elección. Vamos a respetar lo que diga la ciudadanía porque la elección no es una encuesta, sino que es un acto de gobierno. 

Los que estamos, estaremos siempre convencidos de que hay un futuro para el país, para nuestro partido y las ideas Batllistas, las que construyeron la clase media, las que le dieron legislación y garantía a los trabajadores”.