Durante tres horas y en diferentes momentos, se fue presentando en UTEC el trabajo final de Florencia Cabezudo, donde se conjugó la música, el color y el espacio, permitiendo al espectador hacer volar su imaginación.
El proyecto que estuvo enmarcado en el cuadro de Cúneo “Rancho de las Glicinas”, desafió la creatividad y llamó la atención a los asistentes que llegaron hasta la biblioteca Giménez donde se realizó la instalación multisensorial.
Florencia explicó a Crónicas que “realmente me siento satisfecha con lo logrado y la obra inspirada a través del cuadro de Cúneo tiene unos diez minutos de duración y tanto la música como los efectos visuales, fueron pensados en base a esa obra de arte.
De esta manera yo estoy presentando un trabajo final como lo exige la carrera de Música Creativa y Jazz, donde la sociedad está vinculada ya que la propuesta se ha ofrecido libremente a todos quienes han querido asistir a la pinacoteca.
Junto a mí estuvieron dos estudiantes de la carrera de Comunicación Visual de la UDELAR que son Isabel Cabezudo y Matías Britos.
La música fue grabada con la participación de Juani Méndez en saxo soprano, Gabriel Manzanarez en saxo alto, Juan Manuel Gutiérrez en saxo tenor, Patricio Bottcher en saxo barítono, Franco Bastida en piano, Nazarena Martínez en bajo, Nazareno Ruiz en percusión y yo en guitarra eléctrica. La grabación y edición estuvo a cargo de Micaela Heredia, la mezcla por Juan Pablo Sarda y el asesoramiento en grabación y producción por Sebastián Valsecchi.
Mi tutor que es Agustín Pardo y está actualmente en Europa, recibirá todo el material para que pueda apreciar el trabajo realizado”.