La cantidad de dependencias en aumento y el crecimiento de la plantilla de empleados, habla de un cambio en la operativa bancaria, después de un tiempo en el que se redujeron sensiblemente ambas metas, conjuntamente con el crecimiento de las operaciones virtuales.
Al cierre del año pasado y después de un año que puso una pausa en la tendencia, la red física estaba compuesta por 244 sucursales aunque aún mucho menor de las que existieron en el 2014 cuando llegaron a 315.
Según un informe del sistema financiero, los bancos registraron un aumento de depósitos y créditos y solo uno arrojó pérdidas después que bancos y financieras reestructuraron deudas a un total de más de 24.000 personas.
La cantidad de clientes de depósitos creció a 3.672.409, es decir 189.000 clientes más que al comenzar el año.
En cuanto a los tomadores de préstamos la cifra pasó de 2.046.755 a 2.120.351.
El BROU (el mayor del sistema) cuenta con 3.500 empleados y 130 sucursales, y sus autoridades han planteado la necesidad de revisar aspectos del funcionamiento, más que en el crecimiento de la presencia en el país.