El Fiscal Raúl Iglesias que trepó a la notoriedad mediática en las últimas semanas, fue separado del cargo y posiblemente sea sacado del puesto. Lo ordenó el Fiscal de Corte Juan Gómez, en base a informes que recibió en los últimos días.
Iglesias padecerá también la retención de la mitad de sus haberes, como consecuencia de haber archivado 300 denuncias de abuso sexual y haber mantenido fuertes entredichos con el Fiscal de Corte, incluyendo la versión de que Iglesias también aspira al cargo que ostenta Gómez.
La Fiscalía a cargo de Gómez había encargado un informe al Departamento de Políticas Públicas, sobre la actuación de Iglesias, donde se detallan los 910 casos que se encontraban en curso cuando ingresó a la Fiscalía que encabezaba Sylvia Lovesio y de los que ahora quedan 470.
Iglesias había fundamentado sus archivos indicando que la mayoría debía darse por terminado en materia de investigación, ya que no se colectaban evidencias suficientes para formalizar a ninguno de los acusados.
La prensa preguntó varias veces si el tiempo físico para estudiar cada uno de los casos había sido suficiente, de lo que no se obtuvo una respuesta que a juicio de las autoridades fiscales, no resultó convincente.