Anoche el teatro 28 de Febrero abrió sus puertas en el marco de la nueva normalidad y la propuesta que llegó en esa jornada fue el espectáculo de “Urhmana” nueva generación al rescate, presentado por “Punto Casagalpón” que dirige la profesora Paloma Romero.
Sobre su propuesta indicó que “dejamos que el espectador interprete el título y también lo que mostraron las alumnas en la noche de ayer. Es una mezcla de un taller urbano, música, concierto de baile, como lo definió una de las niñas y en base a los trabajos hechos en estos meses un tanto extraños donde internet fue fundamental para seguir adelante con todo el grupo, surge esta idea donde se analiza la música en general.
También hay un análisis de un estudioso de los ritmos urbanos, el Chombo, que hace referencia al tumba tumba, el reggaetón y la influencia de la música en la sociedad. Depende cómo le llegue la música al espectador es cómo apreciará el espectáculo.
Es difícil entender cómo el arte va a poder sobrevivir a todo esto que nos marca la nueva normalidad, son muchas cosas que se han limitado, hace días que trabajamos para modificar todo y cumplir con las normas de protocolo.
Nuestro grupo está conformado por 40 niños y se complica y sabemos que otras escuelas tienen muchos más, por lo que tuvieron que dar de baja sus presentaciones, porque lo que se nos solicita representa un gran esfuerzo y una reformulación de todo el espectáculo.
Lamentablemente por el aforo que tiene ahora la sala quedó mucha gente sin asistir, pero les comunicamos que en noviembre vamos a ofrecer un “tablado moderno” donde el flamenco será lo central.
Varios docentes nos hemos reunido en “Punto Casagalpón” porque se hace difícil llevar adelante todos los proyectos. Las exigencias que marca el protocolo nos hace replantear la idea de realizar espectáculos o no, porque por ejemplo una de las solicitudes es que quienes salen de escena no pueden volver a camerinos, sino que deben salir por la puerta de 28 de Febrero, ingresar al teatro donde se hace la sanitización, para luego ingresar a camerinos y al escenario, si es que deben hacerlo. Esto nos hizo cambiar gran parte de la estructura del espectáculo y por eso era lo que mencionaba anteriormente, que nos hace repensar si realmente vale todo el gran esfuerzo.
Nosotros creemos que sí, los alumnos están acostumbrados a presentar sus realizaciones en esta época del año y haremos todo el esfuerzo para seguir adelante en la nueva normalidad.
Anoche presentamos una salsa que la bailamos de tapabocas y guantes, bien rociados con alcohol, que es lo que se viene haciendo a nivel internacional.
Lo que vale en definitiva es que el espectáculo volvió al teatro y eso realmente nos llena de satisfacción”.