El nuevo caso de COVID-19 que se verificó en el departamento de Paysandú es un caso importado, residente en el exterior, que desde su arribo al país se encontraba cumpliendo el aislamiento obligatorio. Así lo confirmó el Ministerio de Salud Pública, mientras desde el Chuy se advierte la preocupación por venezolanos y cubanos que siguen llegando.
La Alcaldesa del Chuy advirtió a las autoridades nacionales que si bien no es bueno tener una mirada de desconfianza hacia personas de otras nacionalidades, porque el país siempre ha sido receptivo a la inmigración, la llegada de cubanos y venezolanos está preocupando hondamente a la población. Se logró habilitar dos lugares especiales, uno para albergar a los inmigrantes a efectos de que realicen sus respectivos exámenes e hisopados y otro para derivar a aquellos que sean diagnosticados como positivos.
La Alcaldesa de la localidad Mary Urse dijo que en su carácter de autoridad local está en la obligación de advertir sobre la sensación generada dentro de la población, después que a principios de mes un hombre de Bangladesh provocó una inquietud generalizada hasta que se le trasladó a Montevideo. Más tarde dos cubanas madre e hija, dieron positivo y se encuentran aisladas del lado brasileño y se notó en estos días una llegada masiva de inmigrantes, fundamentalmente venezolanos y cubanos.
Urse aclaró que del lado uruguayo aún no hay casos registrados.
Caso Importado en Paysandú
Con respecto a lo sucedido en Paysandú, el comunicado oficial del MSP firmado por el Director Departamental Carlos Leoni estableció que: "cumpliendo con las recomendaciones se trasladó desde Montevideo a la capital sanducera en un automóvil particular, a la persona afectada que residía en el exterior.
Se encuentra en buen estado de salud en su domicilio, cumpliendo la cuarentena, sin acompañantes en la vivienda. La Dirección Departamental de Salud está trabajando en las medidas correspondientes al tiempo que se instó a la población a reforzar las medidas de prevención.