Denuncian la situación que tienen hoy sus hijos, muchos de los cuales no han podido iniciar los cursos debido a la falta de espacio locativo y exigieron a las autoridades una rápida solución.
Hay que recordar que previo a Carnaval los docentes se reunieron e hicieron conocer la situación que se iba a generar al inicio de los cursos debido a que las inscripciones tomadas el pasado año era para tener grupos de 30 alumnos pensando que a partir del 1º del corriente iba ya a estar pronto el nuevo local de Artigas y Giménez.
Los docentes y la dirección se movilizaron procurando respuestas a esta temática pero, hasta ahora siguen funcionando los cursos en el mismo local de Rodó y 18 de Julio, el que este año es totalmente insuficiente.
Por esta razón, ayer los padres se movilizaron reclamando respuestas rápidas. El profesor Gonzalo Ortega señaló que “se está tratando de llegar al Consejo de Enseñanza y hoy se estaría realizando una bipartita del gremio de docentes con las autoridades en Montevideo para saber qué puede surgir de allí. Por esta razón nos auto convocamos y vamos a estar expectantes de lo que pueda surgir de las reuniones de las próximas horas. Jornadas atrás estuvieron en Mercedes el Inspector y el Director del Campus quienes nos expresaron que debíamos aguantar en la situación que estábamos porque se había atrasado la obra y aparentemente, luego del 1º de abril se estaría entregando la misma.
Hay salones que no tienen ventilación, no entran las bancas para recibir a todos los alumnos; hay más grupos que salones, la parte sanitaria tampoco es la adecuada y los padres se han auto convocado preocupados porque muchos de sus hijos no han iniciado aún los cursos”.
El docente Nelson Silva explicó además que ayer se procuró explicar a los padres por qué muchos de sus hijos vuelven a sus casas, debido a que hay grupos que no han iniciado las clases por falta de lugar.
Marcelo Gutiérrez junto a Elsa Cabrera y Suelín Muñoz en representación de los padres explicaron a Crónicas que tras reunirse con los docentes conocieron la realidad que se tenía en ese centro de estudios donde la mayoría de los salones no tiene la capacidad suficiente para recibir a todos los estudiantes inscriptos.
“De esta manera no se pueden dictar clases pero los obligan a concurrir igual porque de lo contrario se les pone falta a los alumnos. Como padres queremos que nos respondan y encuentren una solución porque los chicos siguen perdiendo días porque ahora se dice que el local quedaría pronto para el 1º de abril.
Debido a lo reducido de los salones y a la falta de ventilación, muchos de los estudiantes han sufrido descompensaciones en los días de calor fundamentalmente y las condiciones no son para nada humanas, ni para los estudiantes, ni para los docentes”.