El coterráneo Fernando Chelle, docente, narrador, ensayista y crítico literario, es el ganador del Premio Internacional Sacra Leal de Poesía, organizado por Cuentamontes, de Alicante, España el pasado mes de febrero del año en curso. Actualmente radicado en Colombia es autor de los siguientes libros: Poesía de los pájaros pintados (2013); Curso general de lectoescritura y corrección de estilo (2014); El cuento fantástico del Río de la Plata (2015); Muelles de la palabra (2015) Las otras realidades de la ficción (2016); El cuento latinoamericano en el siglo XX (2016); Spam (2017); Las flores del tiempo (2018) y Cadencias que el aire dilata en las sombras (2018).
Ha participado como ponente y conferencista en diversas universidades, encuentros de escritores y ferias del libro. Sus poemas, ensayos y críticas literarias se han publicado en revistas, periódicos y portales literarios de veintinueve países (Argelia, Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, Cuba, Dinamarca, Ecuador, Egipto, El Salvador, EE. UU, España, Francia, Holanda, Honduras, India, Inglaterra, Italia, México, Nicaragua, Paraguay, Perú, Portugal, Puerto Rico, Suecia, Uruguay Venezuela). Ha recibido múltiples premios y reconocimientos y es Miembro de Honor Academia Tolimense de la Lengua, Colombia, (octubre, 2018). Ha ejercido la docencia durante 12 años en Uruguay y cuatro en Colombia, y actualmente trabaja como corrector de estilo para revistas del ámbito universitario, dando también charlas y conferencias.
ARREPENTIMIENTO
(Premio Internacional Sacra Leal de Poesía 2018)
Lo confieso,
he asesinado mariposas.
Solía escaparme a la montaña
cuando el sol calcinaba la siesta
armado de una rama,
cuanto más frondosa mejor.
El día, que caía
por la falda
se fragmentaba en mariposas;
las había amarillas
naranjas en su mayoría
y otras
que parecían tener un reloj entre las alas.
Venían volando desde la cima
esquivando invisibles
como si supieran
de la existencia del gigante
que las esperaba en el pie.
Venían zigzagueando
Su tiempo de serpentina
Regalando su frágil belleza
Sin prever
La precipitación de rama
De naturaleza violentada.
Venían con el sol de la ladera
en su baile arrítmico y silencioso
a morir a plena luz
en lúdico asesinato.
¡Qué pena da confesarlo!
he asesinado mariposas
he sido un vil soldado
que levantó sus armas
contra la belleza.
Fernando Chelle
“Arrepentimiento” es el título de su poema ganador, perteneciente a su libro “Las flores del tiempo”. En él, el poeta, hace referencia a una etapa de su vida en la que irresponsablemente fue depredador de mariposas; seres frágiles, plenos de una belleza delicada y sublime, armado de una rama frondosa, también arrancada violentamente de la naturaleza.
La idea es hermosa, delicada y perfecta, ya sea la anécdota verdadera o ficticia; pues la imagen de las mariposas son un símbolo universal de transformación y evolución en la vida. Este proceso de metamorfosis que las hace ser capaces de pasar, de arrastrarse a la tierra a encerrarse dentro de un capullo, para luego poder volar libres por el azul celeste, la elevan como una existencia efímera y prodigiosa. En el poema, esta figura se transmuta en un símbolo recurrente de la belleza, que el hombre día a día va destruyendo de la biósfera; como la flora, la fauna, el agua y el paisaje, pues también la rama, usada como instrumento letal, formó parte de la perfección de un espectáculo igualmente mutilado. En cuanto a la forma, el poeta utiliza versos libres, pero no exentos de musicalidad, que evocan aquel tiempo nostálgico de la juventud, y el afligido deseo de confesar aquel pasatiempo hoy trocado en pena, que a su vez desearía olvidar.
¡Qué triste es saber que la naturaleza nos habla y nos suplica sin que la escuchemos! ¿Dónde se fueron aquellas mariposas multicolores de nuestra niñez, los cristalinos manantiales, los arroyos, y los ríos de agua pura? ¿Qué hizo el hombre de ellos?
De la sabiduría indoamericana ha surgido esta premonitoria frase: “Sólo cuando el último árbol esté muerto, el último río envenenado, y el último pez atrapado, el hombre se dará cuenta que no puede comer su dinero”
Nuestras más sinceras felicitaciones al colega y amigo Fernando, quien, con su productiva labor literaria, enorgullece a su país y a su ciudad natal. Hacemos extensivo nuestro saludo a sus padres Ariel y Cristina y a su hermano Mauricio.
Hugo Ultra