Las ventas en los supermercados cayeron 1,5% en el año móvil a junio en un contexto de retracción del consumo. En ese mismo escenario, el 49% de los hogares consideran reducir sensiblemente el gasto en alguno de sus rubros.
Además de esa baja, en el primer semestre del año las ventas mostraron un descenso de 0,3%. Los datos, que surgen de una encuesta mensual realizada por la consultora Deloitte para la Asociación de Supermercados del Uruguay (ASU), fueron presentados durante el desarrollo del Seminario Retail 2016.
El director de la ASU y subdirector general de Grupo Disco, Hugo Avegno, indicó que todos los años la evolución de los precios de los supermercados mantienen una fuerte correlación con el Índice de Precios del Consumo (IPC).
Además, el empresario desglosó los productos en dos grupos: los alimenticios y los no alimenticios.
En el caso de los primeros, las ventas tuvieron un aumento de 1% en el primer semestre del año, aunque mostraron una reducción de 0,4% en el año móvil comprendido entre julio de 2015 a junio de este año.
A su vez, los no alimenticios (electrodomésticos, artículos del hogar, textiles, entre otros) mostraron una caída de 5% en el semestre y de 5,4% en el año móvil a junio.
Avegno informó que entre el 80% y el 85% de las ventas de los supermercados son de alimentos y eso atenuó la caída de las ventas generales en las grandes superficies.
En ese sentido, el directivo de ASU expresó que los productos alimenticios se están vendiendo prácticamente a los mismos volúmenes, pero "la fuerte caída se produjo en los productos no alimenticios. Nuestro sector refleja claramente lo que ocurre en la economía en su conjunto. Estoy tentado de decir: no somos una isla. Hay un escenario de incertidumbre, donde el consumidor uruguayo aprendió la lección y tiende a retraer el consumo de ese tipo de productos".
El empresario indicó que durante la temporada turística se verificaron buenos niveles de venta que cayeron posteriormente. La esperanza es, entonces, que las ventas vuelvan a mostrar buenos resultados sobre fin de año.
Por su parte, el director del área de economía de Equipos Consultores, Alejandro Cavallo, también señaló que en los últimos meses se verificó un deterioro en la predisposición de los consumidores a adquirir bienes durables.
Ello surge del Índice de Confianza del Consumidor (ICC) elaborado por la Cátedra SURA de Confianza Económica de la Universidad Católica y Equipos Consultores.
El ICC registró una caída de 18,5% en los primeros seis meses del año en comparación al mismo período de 2015, la máxima variación negativa para un semestre desde que la medición se lleva a cabo. Cavallo aclaró igualmente que en julio la confianza de los consumidores mostró un mejor resultado impulsada por dos noticias positivas: el anuncio de UPM de la instalación de una tercera planta de celulosa y la colocación de deuda a largo plazo por US$ 1.147 millones en los mercados internacionales.
En otro orden, Cavallo se refirió a algunas conductas que están llevando adelante los consumidores.
En ese sentido, indicó que el 48% de los consumidores están más atentos a las promociones, descuentos y ofertas de productos que antes.
Además, el 49% de los hogares considera reducir sensiblemente el gasto en algún rubro.
Sobre este aspecto, detalló que el mayor porcentaje se observó en los hogares de clase baja con un 55%. En los de clase alta la reducción de ese gasto alcanza al 40% de los hogares y al 50% en los hogares de clase media.
A su vez, informó que el 58% de los consumidores de bienes de supermercados y almacenes se fija más en los precios que hace un año atrás. El porcentaje llegó al 73% en los segmentos más bajos.